lunes, 3 de noviembre de 2008

MIENTEN CUANDO DICEN QUE NADIE ADVIRTIÓ DE LA CRISIS ACTUAL

Reiteradamente, responsables políticos y económicos afirman que la crisis que nos toca vivir era absolutamente impredecible y por lo tanto, imposible anticiparse a la misma.

Os invito a leer el siguiente artículo de José Manuel Naredo para desmitificar y desenmascarar. Clarito, preciso y fundamentado, como sólo Naredo sabe hacer.
Además, en internet lo podéis encontrar en Sin Permiso (02-11-2008) y Público (31-10-2008)

LA BURBUJA Y SUS CÓMPLICES

José Manuel Naredo


La larga duración de la fase alcista del presente ciclo inmobiliario indujo a la población a habituarse a ella como si de algo normal y permanente se tratara. Los diez años de auge crearon hábitos de vida y de negocio muy arraigados. Se presuponía que la continuidad de las subidas de precios de los inmuebles haría siempre interesante su compra, aunque fuera a crédito, reforzando la presión compradora que hacía realidad las revalorizaciones previstas. Sobre estas bases se desarrolló a sus anchas la espiral de revalorizaciones y compras, cada vez más apalancadas con créditos, que caracteriza a las llamadas burbujas bursátiles o inmobiliarias.

Pero la experiencia demuestra que ni los árboles pueden crecer hasta el cielo, ni el auge puede ser permanente, porque genera desequilibrios que en algún momento lo hacen declinar, normalmente, por un estrangulamiento financiero que acaba cortando la mencionada espiral y haciendo que los promotores y compradores más endeudados sufran las consecuencias. Así, desde hace más de un lustro he venido advirtiendo que "cuanto más se prolongue la burbuja inmobiliario-constructiva actual, más inquietantes pueden ser sus resultados, habida cuenta del peso anormalmente alto que tienen los activos [y el endeudamiento] inmobiliarios en el patrimonio de los hogares". Pues, a mi juicio, lo más fácil era prever el desenlace crítico al que conducía el auge inmobiliario; lo verdaderamente difícil era imaginar que el auge podía llegar hasta donde ha llegado, al disponer la economía española –amparada en el euro— de una financiación externa tan inusualmente copiosa y barata. Pero esa misma financiación externa que prolongó tanto el auge fue la que, a la postre, lo acabó estrangulando. Pues España, al erigirse en líder del auge inmobiliario, acabó erigiéndose también en líder del riesgo inmobiliario y desanimando dicha financiación.

Hace ya más de un año, tras constatar en un estudio que la exposición de la economía española al riesgo inmobiliario superaba en todos los aspectos al de los otros países de nuestro entorno, incluido EEUU, concluíamos diciendo que "la suerte ya estaba echada": no cabía evitar la crisis, solo gestionarla lo mejor posible. Pero nada se hizo, y esta gestión resulta hoy más difícil cuando, como preveíamos, el superávit presupuestario se ha desinflado con una rapidez pasmosa sin que antes se hubiera orientado a promover un relevo de actividades que de momento no se vislumbra. Si a esto añadimos que la política económica, al no poder devaluar la moneda, no cuenta ya con este medio tradicional de hacer que la economía española recupere posiciones competitivas que faciliten el relanzamiento de su actividad exportadora, concluíamos que todo "hacía presagiar un estancamiento de larga duración".

Debería ser responsabilidad de gobiernos y analistas evitar con medidas y advertencias que las burbujas alcancen dimensiones que se revelan social y económicamente amenazantes. Pero en España no han predominado la prudencia y la finura en las políticas ni en los pronósticos: los gobiernos han sido tan irresponsables, como raros los analistas que hemos venido advirtiendo desde hace tiempo sobre los peligros del evidente desenlace del ciclo. Como botón de muestra de ambas irresponsabilidades resulta a la vez sorprendente y penoso escuchar a todo un ministro de Economía confesar que la crisis le había pillado desprevenido, haciendo gala ya sea de un cinismo a prueba de bomba o –no se sabe qué es peor– de una incompetencia supina.

En mi opinión, los fallos no han venido tanto de errores de diagnóstico, como de la censura implícita que impedía comunicar que se creía que podía crear "alarma social". Pues me resisto a creer que cualquier analista mínimamente experimentado no supiera que el pulso de la coyuntura económica acostumbra a ser cíclico y que la magnitud del auge y de los desequilibrios originados presagian la magnitud del declive. Y me consta que, entre los economistas más próximos al poder político y/o empresarial, estaba mal visto reconocer públicamente la propia existencia de la burbuja inmobiliaria como no fuera para afirmar, a modo de mantra o conjuro repetitivo, que el "aterrizaje sería suave" a fin de no desanimar a los compradores de inmuebles, ni siquiera en la fase final y más comprometida del ciclo. Así, ni los avisos esporádicos del Banco de España, ni los trabajos de algunos analistas aislados pudieron romper el coro de complacencia entonado por los profesionales, empresarios y políticos de un sector y de un país que acostumbran a premiar la obediencia servil y a despreciar la inteligencia.

Pero la coyuntura económica no se controla con campañas de imagen que nieguen la crisis, ensalcen la solidez de la economía española y refuercen la confianza de los inversores, cuando las cifras dicen todo lo contrario, pues estas mandan más que las campañas. Si la capacidad de financiación de los hogares ya está exhausta de tanto "invertir en ladrillos", si la inversión extranjera en inmuebles ya empezó a decaer hace cuatro años y si ya no se puede obtener, como antes, en el exterior financiación barata y abundante, no hay campañas de imagen que valgan.

La gran irresponsabilidad de los gobiernos no solo estriba en haber negado o soslayado la burbuja inmobiliaria, sino en haberla seguido alimentando hasta el final con potentes desgravaciones fiscales y ocultaciones consentidas de plusvalías, que desembocaron en casos tan sonados como el de Marbella, forzando así el lamentable monocultivo inmobiliario de este país. Todo ello cuando deberían de haberla identificado y gestionado desde hace tiempo para evitar un desenlace tan poco recomendable como al que estamos asistiendo. Situación que además pide a gritos el cambio del actual modelo inmobiliario que, para colmo, nuestros "avanzados" políticos ni siquiera se han planteado.

El gran error político del presidente Zapatero fue, en suma, no tomar conciencia y ni plantear con claridad el horizonte de crisis al que llevaba el auge inmobiliario e iniciar su controlada reconversión cuando ganó sus primeras elecciones, hace ya cinco años. Entonces sí que hubiera sido posible planificar con tiempo el añorado "aterrizaje suave" y la necesaria reconversión "del sector". También entonces hubiera podido culpar a quienes le precedieron de la comprometida situación a la que se veía abocada la economía española. Habría podido esquivar, entonces, la burbuja que le acabó explotando en la cara. Con el agravante de que, al hacer suyo el "España va bien" de Aznar, dio pie a que ahora lo señalen como culpable.

1 comentario:

Anónimo dijo...

y lo peor de todo es que un gobierno socialista proponga medidas como la de que aplazar el pago mensual de las hipotecas a los desempelados, es decir, que el estado, de ideología socialista(¿?)lo primero que quiere salvar es que no haya morosidad hipotecaria,
con estas condiciones:
Tener suscrito el préstamo antes del 1 de septiembre de 2008.VAYA, SI LO SE COMPRO UN PISO ANTES, REBAJAS FINANCIERAS DE ESE TIPO NO SON TODOS LOS DIAS
Ser trabajador por cuenta ajena y estar parado o perder el trabajo antes del 1 de enero de 2010.ESTE REQUISITO ANIMARÁ A MUCHOS EMPLEADORES A DESPEDIR Y A MUCHOS EMPLEADOS HASTA EL CUELLO, PREFERIR EL DESPIDO QUE CONLLEVE REBAJA EN EL PRESTAMO Y QUEDARSE EN EL PARO, CON EL SUBSIDIO Y EL DINERO NEGRO QUE SE PUEDE CONSEGUIR EN ESPAÑA(RECORDEMOS ESE 22% DEL PIB) ES LO MÁS OPROTUNO.
Ser autónomo con cargas familiares que haya cerrado su negocio o que acredite pérdidas que reduzcan sus ingresos hasta tres veces el Indicador Público de Efectos de Renta Múltiple (IPREM), que está en 516 euros, según Efe.GUAU GUAU GUAU, EN ALGUNOS CASOS PUEDE SER UNA MEDIDA EQUITATIVA PERO EN LA MAYORIA SIGUE AYUDANDO CON CRITERIOS QUE DESANIMAN A MANTENER EL NEGOCIO ABIERTO Y ADEMÁS BENEFICIA A UN COLECTIVO CON PROBLEMAS PERO CREO QUE NO EL QUE MÁS, TRABAJADORES POR CUENTA AJENA, MUJERES Y JOVENES,
Pasar a ser pensionista de viudedad con cargas familiares.
La hipoteca no debe superar los 170.000 euros. MENOS MAL, DE ECHO PARA SER MÁS JUSTOS QUE LA HIPOTECA NO SUPERE LOS 500.000 EUROS, TODOS LOS QUE HAN DECIDIDO EMBARCARSE EN COMPRAR ESE CHALECITO GRANDE CON JARDIN SIN PENSAR EN EL FUTURO HAY QUE AYUDARLES AL MÁXIMO, SEÑORES ECONOMISTAS, SI A ALGUIEN QUE NO HA PLANIFICADO SU HORIZONTE TEMPORAL CON CABEZA LE AYUDAMOS ESTAMOS PERJUDICANDO AL QUE HA DECIDIDO SEGUIR DE ALQUILER EN VEZ DE LANZARSE AL MERCADO A COMPRAR, TENGO 31 AÑOS Y MUCHA GENTE QUE CONOZCO SE HA METIDO EN UNA O DOS HIPOTECAS ANIMADO POR LA FAMILIA Y SIN VALORAR LA INVERSIÓN, MÁS BIEN UN "COMPRA, COMPRA, COMPRA QUE CUANDO SUBA VENDES MUCHO MÁS CARO, AMORTIZAS HIPOTECA Y COMPRAS UN 4X4 PARA IR AL ALCAMPO A COMPRAR LOS DOMINGOS" GARULOS!!!
El préstamo tiene que ser para vivienda habitual o primera vivienda. SE PUSO A NOMBRE DE LA MUJER, O DEL HIJO, O DE LA MASCOTA FAMILIAR, TODO EL QUE TRABAJA DE NOTARIA SABE COMO SE LAS GASTAN
El límite máximo que se dejará de pagar será de 500 euros al mes.
El préstamo se dejará de pagar a partir del 1 de enero de 2009 y la moratoria será posible durante 24 meses, hasta diciembre de 2010.
A partir de 2011 se deberá empezar pagar la cantidad que se haya aplazado mediante un prorrateo -repartido entre mensualidades- en un periodo máximo de 10 años.
La medida puede beneficiar a 500.000 familias, según Zapatero, y está "hablada con la banca", según fuentes del Ministerio de Economía.
SEÑORES, CADA VEZ CREO MENOS EN LOS ECONOMISTAS, EMPEZANDO POR EL MINISTRO, EX COMISARIO DE ECONOMIA Y FINANZAS DE LA UE Y ECONOMISTA DEL ESTADO(uauauauauauauauaauauaua)
HASTA MI MADRE DE 71 AÑOS Y QUE NO SABE ESCRIBIR HACE VARIOS AÑOS QUE AHORRA UN POCO Y DICE QUE ESTO VA A ESTALLAR(LO MISMO LE DIGO QUE SE PRESENTE A LAS OPOSICIONES DE AGE Y EDE ESTE AÑO)
POR ULTIMO, Y PERDON POR EL COMENTARIO LARGO, CREO QUE EN LOS AÑOS 80 CUANDO YO ERA UN NIÑO PEQUEÑO, MI FAMILIA SUFRIO LAS DESIDIAS DE FIDERCAYA, RUMASA Y LA REFORMA DE LA LEY DE ARRENDAMIENTOS DE BOYER,
"NO ENTIENDO LAS SIGLAS DE LOS PARTIDOS"
FIRMA: EUTIMIO